¿Qué es una auditoría externa?
La auditoría externa es el análisis que realiza un auditor ajeno a la empresa sobre los procesos que desarrolla la misma o las obligaciones legales aplicables. El objetivo es comprobar que se cumple con la normativa interna o con la legislación aplicable de manera adecuada. Una auditoría externa puede incluir la evaluación de otros aspectos de una empresa, como los controles internos, los sistemas de gestión de riesgos y el cumplimiento normativo. Esto puede incluir aspectos como:
- Evaluación de la efectividad de los controles internos: Examinar los procesos y procedimientos internos para identificar posibles riesgos y garantizar que los controles sean adecuados y efectivos.
- Revisión de la gestión de riesgos: Evaluar cómo se identifican, miden y gestionan los riesgos en la organización y si se están tomando las medidas adecuadas para mitigarlos.
- Cumplimiento normativo y legal: Verificar si la empresa cumple con las leyes y regulaciones pertinentes en su sector y si está siguiendo las prácticas contables y financieras adecuadas.
- Revisión de operaciones y procesos: Evaluar la eficiencia y la efectividad de los procesos operativos de la empresa para identificar áreas de mejora y aumentar la eficiencia.
- Revisión de la gobernanza corporativa: Evaluar la estructura de gobierno corporativo de la empresa para garantizar la transparencia y la rendición de cuentas en la toma de decisiones y la gestión de la empresa.
La auditoría externa se lleva a cabo para proporcionar una garantía objetiva y mejorar la confianza de las partes interesadas en la empresa al evaluar una amplia gama de aspectos como materia de privacidad, prevención de blanqueo de capitales o compliance
¿Qué beneficios tiene la auditoría externa?
La auditoría externa, entre otras cosas, permite:
- Controlar la actividad de la empresa.
- Detectar los puntos fuertes y débiles de la gestión.
- Señalar incumplimientos normativos o malas prácticas.
- Identificar riesgos y proponer mejoras de actuación dentro de la organización.
¿Qué es una auditoría interna?
Una auditoría interna es un proceso sistemático y documentado llevado a cabo por una organización para evaluar y mejorar la eficacia de sus controles, procesos y operaciones. Esta actividad es llevada a cabo por un departamento interno o por auditores internos que trabajan de manera independiente de las áreas que están siendo auditadas. El objetivo principal de la auditoría interna es proporcionar a la dirección de la organización información y análisis objetivos, así como recomendaciones para mejorar la gestión de riesgos, el control interno y los procesos operativos.
Algunas de las funciones y objetivos clave de la auditoría interna incluyen:
- Evaluar la eficacia y la eficiencia de los controles internos de la organización.
- Revisar y evaluar el cumplimiento de las políticas y regulaciones internas y externas.
- Identificar áreas de riesgo y proponer medidas para mitigar esos riesgos.
- Proporcionar asesoramiento y recomendaciones para mejorar los procesos y operaciones de la organización.
- Verificar la fiabilidad de la información financiera y de gestión.
- Asegurar que los activos de la organización estén protegidos de manera adecuada.
La auditoría interna desempeña un papel fundamental en la mejora continua de una organización al proporcionar una evaluación imparcial de sus operaciones y al ayudar a garantizar el cumplimiento de las normas y regulaciones aplicables. También puede ayudar a prevenir fraudes y malas prácticas dentro de la organización al identificar posibles áreas de preocupación y proponer soluciones y mejoras.
¿Quién realiza las auditorías?
En el caso de las auditorías internas, el equipo auditor normalmente formará parte de la organización.
En el caso de las auditorías externas, el equipo auditor siempre es ajeno a la entidad, sin que exista ninguna relación previa a la revisión.
Hay que tener en cuenta que, en las auditorías de Protección de Datos, el RGPD asigna una serie de funciones al Delegado de Protección de Datos (DPD), entre las que está la de supervisar las políticas internas de la organización y las auditorías correspondientes.
En ningún caso, el DPD debe realizar dichas auditorías, puesto que en las auditorías de Protección de Datos también se verifica el cumplimiento de las funciones de este.
¿Qué tienen en común la auditoría interna y externa?
El principal punto en común entre ambos tipos de auditoría es el objetivo que se pretende conseguir: la revisión y verificación del nivel de cumplimiento de una entidad.
Además, tanto en la auditoría interna como en la externa se requiere que el equipo auditor sea especializado y cumpla los requisitos de capacitación necesarios. Así, debe acreditarse que los auditores disponen de la formación y conocimientos técnicos relacionados con el objeto de la auditoría.
En Key Auditors contamos con grandes profesionales que realizan auditorías de Protección de Datos, y ponemos a tu servicio un experto en Privacidad y Protección de Datos que asumirá las funciones y la labor del Delegado de Protección de Datos, garantizando el estricto cumplimiento de la normativa y la exigencia que el perfil del DPD supone.